Cada AFP tiene el propósito de administrar los ahorros de los cotizantes, función que se realiza con total transparencia y en estricto apego a la Ley; y ante ello, la Ley establece la existencia de un ente supervisor: Superintendencia del Sistema Financiero, el cual vela por darle cumplimiento a la norma aplicable para las funciones de la AFP.
Las funciones de una AFP, van desde la afiliación de los trabajadores al sistema, la recaudación y registro de las cotizaciones de los trabajadores y sus empleadores hasta la inversión de los fondos colectados con la finalidad de generar rentabilidad para sus afiliados; para ello, realizan inversiones en el Mercado de Valores.
También son responsables de administrar el pago de los beneficios definidos en la Ley: Pensiones y otros beneficios por vejez, invalidez y sobrevivencia, por lo que contratan una póliza de seguro colectiva de invalidez y sobrevivencia.